por Argelia Juárez Luévano de Maternidad Postparto
Tener un banco de leche materna en casa es una excelente opción para tener una reserva de la mejor leche que puede consumir tu bebé. Una de las razones más comunes para comenzar un banco es el regreso al trabajo público remunerado de la madre lactante. Para seguir produciendo leche es muy importante que se la extraiga tanto en casa como en el centro laboral. La previsión es otra buena razón para crearlo ya que en algunas ocasiones mamá y bebé tienen que separarse ya sea porque mamá necesita salir sola para procurarse autocuidado o porque tiene que hacer un viaje inesperado. Damos por sentada la salud de la madre lactante, pero en muchas ocasiones se enferma más o menos de gravedad y tiene que ser atendida u hospitalizada con urgencia. En estos casos, la reserva de leche es ideal para seguir alimentando de forma diferida al bebé o al niño pequeño mientras mamá está bajo tratamiento. Mientras se recupera es posible que continúe la extracción para que no baje su producción ya que muchos medicamentos son compatibles [1] con la lactancia materna. El tiempo ideal para comenzar tu banco es antes de los tres meses pues en ese periodo la demanda de leche aun no está establecida del todo. Un momento idóneo para comenzarlo es cuando llega la “bajada/subida” de la leche. Esto sucede más o menos como al tercer día del nacimiento de tu bebé. Notarás los pechos duros y pesados porque hay un excedente de leche, es la común ingurgitación mamaria, para aliviarla necesitarás extraerla. Con estas primeras extracciones de leche puedes comenzar tu banco desde la primera semana. Si no fuera el caso y ya tienes fecha de regreso al trabajo se recomienda comenzar el banco mínimo 15 días antes, de preferencia un mes para que puedas enfrentar con paciencia y calma los retos de crearlo. Si bien puedes hacer extracciones exitosas de forma manual con la técnica adecuada, tener un extractor manual o eléctrico de tu medida será de mucha ayuda para aprovechar más tu tiempo y energía pues necesitaras estar lo más relajada. Hacer un banco de leche requiere del apoyo comprometido de toda la sociedad, en especial de tu familia y de tus colaboradores. No se trata de sólo un procedimiento mecánico sino de crear un ambiente emocionalmente seguro, en donde mamá pueda estar realmente tranquila sintiéndose orgullosa de seguir proveyendo el mejor alimento para su bebé. Y para garantizarlo se necesita resguardar la calidad de la leche: informar y capacitar sobre los lineamientos de extracción, almacenamiento y conservación es básico para tal resguardo. Ya sea en la comodidad de su casa o en el lactario certificado de su centro de trabajo mamá tiene que sentirse bien mientras hace las extracciones de leche mientras disfruta de su música preferida, saborea algo delicioso o evoca a su bebé. Imaginar su bella mirada o sus tiernos deditos, ver una hermosa foto en la que los dos aparecen juntos ayuda mucho. La hormona oxitocina, la hormona del amor, se segregará y activará el efecto de eyección y la leche saldrá con mayor facilidad. Es perfectamente posible crear un buen banco de leche materna en casa. Tener mucha paciencia y confianza, pedir ayuda a profesionales de la salud actualizados en lactancia y sobre todo cobijar a mamá con mucho amor porque está haciendo un esfuerzo enorme para seguir dando lo mejor a su familia.
[1] Para compatibilidad de medicamentos véase: www.e-lactancia.org